Los planes de pensiones individuales se crearon con la idea de poder acumular un capital adicional para la jubilación de forma privada y de esa forma poder compensar el decrecimiento económico que supone dejar de trabajar. Estos tienen varias particularidades que los hacen exclusivos:
- No se pueden rescatar hasta la jubilación, salvo fallecimiento, invalidez o paro prolongado.
- Lo aportado en el año fiscal desgrava el total de la base imponible hasta 10.000€ ó 12.500€ para mayores de 50 años.
- Los planes de pensiones individuales, están integrados en fondos de pensiones, siendo cada fondo gestionado por la entidad con la que se contrata el plan. Las entidades financieras que están autorizadas para comercializar planes de pensiones son: bancos, cajas de ahorro, gestoras de fondos y pensiones, y compañías o mutualidades de seguros.
- Lo más importante a la hora de suscribir un plan de pensiones es ver en dónde se está invirtiendo el dinero del fondo de pensiones, pues un fondo mal gestionado o que simplemente no coincida con el perfil financiero del partícipe, puede llegar a ser muy perjudicial para éste último. Pongamos un ejemplo: Imaginemos que una persona con perfil conservador (no quiere arriesgar con su dinero) tiene el plan en un fondo que está invirtiendo en renta variable. Esto sería perjudicial sobretodo en estos tiempos en los que la renta variable está en pérdida. Es por ello que un buen asesoramiento cuando se contrata o traspasa el plan es muy importante para no llevarse sustos en el futuro.
- Dado que los planes no se pueden rescatar, la ley permite cambiar el plan de fondo cuantas veces se quiera sin que ello afecte a lo ya ahorrado. En otras palabras, digamos que los cambios de fondo no tienen gastos, ya sean cambiando de fondo en la misma entidad o en distintas entidades.
- A tener en cuenta por último son las comisiones que lleve el plan implícitas. Dependiendo de la gestora, tendrá unas u otras.
- Los planes de pensiones no tienen rentabilidad garantizada, a pesar de que algunas publicidades engañosas puedan dar pie a pensar que sí la tienen. Por ello y debido a la inestabilidad financiera en los últimos años, se ha extendido la comercialización de los PPA (plan de previsión asegurado) que son compatibles con los Planes de pensiones y que sí llevan una rentabilidad garantizada. Para más información podéis leer los artículos de nuestro blog http://buenseguros.blogspot.com.es/2012/11/que-es-un-ppa-y-que-diferencias-tiene.html
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